Con motivo del Día del Padre que se celebra este sábado 19 de marzo, reunimos en Butarque a Ángel, Javier y Álvaro Amores, una familia de abonados al C.D. Leganés que ha ido transmitiendo el sentimiento pepinero de padre a hijo, y que une a tres generaciones cada vez que el equipo juega en nuestro estadio.
Álvaro Amores, abonado nº 11.133, es el último niño a quien su padre, Javier, ha hecho socio del club. Fue hace apenas unos días, después de haber venido durante muchos partidos al estadio. Algo que el propio Javier, actual abonado nº 146, relata que ya hizo su padre con él: "Yo iba con mi padre con cuatro o cinco años y entraba con otros niños junto al Rodríguez de Miguel. Hasta que, con doce o trece años, mi padre tuvo que hacerme socio para poder entrar con él".
A Ángel, abonado nº 72, le inculcó la pasión pepinera su suegro Saturnino Ordóñez, quien era uno de los socios más antiguos del club desde su fundación: "Es un vínculo muy fuerte y una tradición el venir al fútbol con mi hijo. Desde muy pequeño Javier se ponía a jugar en los alrededores del antiguo estadio y siempre estaba con un balón". Para Javier "es un orgullo el hecho de venir con mi padre a ver al Lega los domingos y ahora abonar a mi hijo. Espero que él siga la misma tradición y que, en su día, esté agradecido por haberle traído al Lega".
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